Robert Lewandowski dejó al Barcelona con un jugador menos en el partido contra Osasuna en el minuto 31 de la primera parte. En una disputa aérea, el polaco impactó con el codo en la cara de David García y vio la segunda amarilla.
Tras ser expulsado y protestarle a Gil Manzano con evidentes gestos de incredulidad, Lewandowski se marchó a vestuarios haciendo aspavientos y dejando un gesto que ha dado que hablar: se llevó a la mano a la nariz mientras señalaba al árbitro extremeño. El árbitro lo recogió en el acta.
Ahora le toca decidir al Comité de Competición como interpretan ellos los gestos del delantero del Barça. Si lo consideran como insulto, pues Lewandowski estaría fuera al menos tres encuentros: uno por la doble amarilla y consiguiente expulsión y otros dos por dirigirse en esos términos al colegiado. Sanción semejante a la del sevillista Montiel. Lewandowski se perderá con seguridad el derbi catalán ante el Espanyol en el Camp Nou y corre mucho riesgo su presencia ante el Atlético, en el Metropolitano, y ante el Betis, en el Villamarín.
Gestos aparte, esta es su segunda expulsión en las cinco grandes ligas: la primera fue cuando aún militaba en las filas del Borussia Dortmund. Aquel 2 de febrero de 2013, también vio la tarjeta roja en un encuentro contra el Hamburgo.
Con infromación de AS México.