Una familia perteneciente a un culto religioso quemó viva a una anciana de 84 años con la supuesta intención de “purgar sus pecados”. La señora fue trasladada a urgencias, pero poco después murió debido a las quemaduras de tercer grado.
Este suceso ocurrió en Balingasag, un pueblo de las Filipinas. La señora fallecida se identificaba como Teofila Camungay Cabusas, cuyos gritos agonizantes fueron tan profundos que llegaron hasta los oídos de los vecinos, quienes solicitaron la ayuda de las autoridades.
Según la opinión de los miembros de la familia, la razón de los hechos fue gracias a que la anciana no quería unirse a su nuevo culto religioso. El nieto de la señora, llamado Cresanto Ercilla de 22 años de edad es el líder del grupo, y aparentemente ha golpeado en otras ocasiones a la señora.
Culto religioso, ¿Por fé o interés?
11 parientes de la señora participaron en el asesinato.
Siete de las once personas que participaron en el atroz acto fueron detenidas, mientras las otras cuatro siguen prófugos.
El jefe de policía de la ciudad, Teodoro de Oro, comentó que la mujer había cobrado una pensión de 130 libras esterlinas, (equivalente a 2,980.29 pesos mexicanos), algunos días previo a su fallecimiento.
El nieto de la fallecida declaró que fue poseído por el espíritu de Tomás Eugenio, el fundador de una organización religiosa llamada Misioneros Filipinos Benevolentes Cristianos. Y aseguró que él le instó a denunciar como pecadora a su abuela delante de toda la familia, culpándola por todo lo malo que les ha sucedido en sus vidas. Los investigadores aseguran que existen conflictos de fe cosa que pudiera haber sido el motivo para realizar el asesinato.
“Un crimen así es difícil de creer: 11 familiares, hijos y nietos incluidos, fueron los que lo hicieron”, dijo un investigador de la Policía local.