Durante la noche del viernes pasado, para mala fortuna de Cuba, un rayo terminó por atinar e impactar una de sus instalaciones petroleras en la provincia de Matanzas, que se encuentra a 60 millas de la capital, provocando un caos y la evacuación de al menos 600 personas.
El incendio, desafortunadamente, dejó decenas de personas heridas y, hasta ahora, 17 bomberos que combatían las llamas se encuentran desaparecidos. La situación fue tan preocupante, que hasta acudieron helicópteros al lugar para intentar frenar el avance del fuego. Tan así, se sabe que unas 1,300 personas huyeron de la zona, de acuerdo con el informe de la oficina del presidente, Miguel Díaz-Canel.