Esta semana, un tiroteo escolar nuevamente conmovió al mundo pero esta vez se trató de una escuela en Rusia. La mañana de este lunes 26 de septiembre, un hombre armado que vestía una playera con una esvástica roja impresa —el símbolo asociado con los nazis y antisemitas en la Segunda Guerra Mundial— abrió fuego en una escuela en la capital de la República Udmurtia.
Como resultado de esta agresión, 17 personas murieron a causa de los disparos, entre estas un guardia de seguridad escolar, dos maestros y 11 menores de edad, según se sabe hasta el momento. Además, 23 personas más resultaron heridas.
Durante los últimos años, el Kremlin ha experimentado varios tiroteos en sus escuelas. Durante el año pasado, ocurrieron dos a gran escala: el primero en mayo de 2021, donde un adolescente armado mató a siete niños y dos adultos en la ciudad de Kazán; mientras que el segundo ocurrió durante el mes de septiembre, cuando un estudiante asistió a una universidad en la ciudad de Perm con un rifle de caza y terminó asesinando al menos a seis personas.
El agresor ya fue identificado como Artem Kazantsev, un hombre de poco más de 30 años, que es ex alumno de la escuela que atacó. El hombre se quitó la vida momentos después del tiroteo.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que el presi ruso, Vladimir Putin, “lamenta profundamente” las muertes y calificó este incidente como “un acto terrorista de una persona que aparentemente pertenece a una organización o grupo neofascista”.
