Islas Mujeres.- El 21 de julio Fernanda Canul Blanco de tan solo 12 años, salió de su casa para ir a trabajar a la casa de un vecino de oficio taquero, sin embargo ya no volvió a su hogar.
Al realizarle una entrevista a su mamá menciono que ella no quería dejarla trabajar, sin embargo, sus padres aceptaron ante la petición insistente de Fernanda por comenzar a generar su propio dinero y creyendo que eso la haría mas responsable.
Al desesperarse porque la niña no regresaba a su vivienda fueron a preguntar por ella a la casa donde trabajaba lavando trastes, pero recibieron respuesta negativa, nadie sabía sobre ella.
Pasaron dos días y sus sospechas aumentaron al percatarse que Marco Antonio Cauich Adrían, uno de los sospechosos abandonó el lugar con todo y pertenencias.
Ante esta acción la fiscalía General del Estados de Quintana Roo ofreció una gran recompensa de un millón de pesos a quien brinde información sobre su paradero, quien según la versión difundida públicamente en la entidad sureña sería responsable de la desaparición de la pequeña.
La cantidad ofrecida por la FGE tiene una explicación, los padres de la menor acudieron a protestar a uno de los eventos que realizó en el estado el presidente Andrés Manuel López Obrador, de no dar con el culpable será un caso de tantos más en México.