El líder de la secta religiosa «Good News International», Paul Mackenzie, junto con 30 de sus seguidores, comparecieron el miércoles ante un tribunal keniano, enfrentando cargos relacionados con el asesinato de 191 niños. La tragedia, que ha conmocionado a la nación africana, ha revelado horrores inimaginables vinculados a prácticas extremas dentro de la secta.
La fiscalía informa que los restos de los niños, espeluznantemente, incluyen 180 cuerpos aún no identificados, arrojando luz sobre la escala y la brutalidad de los crímenes. La Iglesia Good News International, dirigida por Mackenzie, ha sido vinculada a la muerte de 429 de sus miembros en total.
La siniestra revelación se produjo cuando la policía rescató a 15 seguidores demacrados de la secta, quienes revelaron que Mackenzie había ordenado un ayuno mortal. Según las declaraciones de los rescatados, el líder de la secta había convencido a sus seguidores de que llevar a cabo este ayuno extremo les permitiría encontrar a Jesucristo antes del inminente apocalipsis.
El juicio, que se lleva a cabo en Malindi, está siendo seguido de cerca por la opinión pública, mientras el país intenta comprender cómo tales atrocidades pudieron ocurrir en su suelo. Las autoridades buscan esclarecer el papel de cada acusado en estos trágicos eventos y asegurarse de que se haga justicia.
«Soy Chihuahua» continuará brindando información y actualizaciones sobre este impactante caso a medida que se desarrolla el juicio. La comunidad internacional se une en la condena de estas acciones y espera que se haga justicia en nombre de las víctimas inocentes.