El gobierno mexicano ha tomado la decisión de revocar los aranceles recientemente impuestos al aluminio extranjero, que oscilaban entre un 20 y un 35 por ciento. Estos aranceles habían sido establecidos el 22 de abril, con la intención de proteger la producción nacional. Sin embargo, ante la evidente escasez de producción local, se ha optado por dar marcha atrás en esta medida.
La medida inicial se había implementado con la intención de fortalecer la industria nacional del aluminio. Sin embargo, la realidad actual muestra una falta de capacidad para satisfacer la demanda interna, lo que ha llevado a la revocación de los aranceles.
La situación revela la complejidad de equilibrar los intereses comerciales nacionales e internacionales. Mientras se busca proteger la industria local, también es crucial mantener relaciones comerciales estables y asegurar el suministro de materiales esenciales para la economía.
Se espera que esta decisión tenga repercusiones tanto en el ámbito nacional como en el internacional. Para más detalles sobre esta noticia y otras actualizaciones, se puede seguir a «Soy Chihuahua».