En un pueblo de Lima, Perú Manchitas vivió en la calle, pero era amado, cuidado y alimentado por los vecinos. Cuando falleció le hicieron una despedida que hizo llorar a más de uno
Manchas vivió por años en Lurín, Lima, Perú. El can era muy amado por todo el pueblo pues siempre hacía presencia en las festividades, aparte de que tenía un carácter distintivo, los vecinos lo alimentaban y cuidaban, por lo que pasó a ser la mascota del lugar.
El perrito fue envejeciendo y fue como su salud se fue deteriorando, duró semanas hospitalizado en donde los lugareños cooperaron para costear sus alimentos y salvarlo, pero al final manchas perdió la vida. Entristecidos por la noticia, le prepararon una misa y le hicieron un sepelio en donde le dieron su último adiós.
Los habitantes tenían a un peludito al cual amaban y respetaban, Manchas, un can callejero que no deseaba ser adoptado por ninguna familia pues se sentía bien recibiendo diariamente cariño de todos los habitantes del sitio, vecinos le daban comida y jugaban con él.
Cualquier evento, desde XV, bodas hasta fiestas del lugar, este perro se hacía presente, en la iglesia era bien recibido y todos apreciaban su presencia y educación. Fue a principios del 2020 que este perro empezó a enfermar debido a su avanzada edad.
Todos cooperaron para poder salvar a manchas, quien estaba en una clínica veterinaria y pasó después a una casa en donde lo atendieron. No obstante, para el 20 de enero del 2020 este perrito subió al cielo.
