Chihuahua.- Comenzó como cafetería “El Combate” y hoy cuenta con tostadores en Hermosillo, Sonora y Mexicali, Baja California.
“El más importante de los reconocimientos es el mantenerse en la preferencia de un mercado con gusto refinado, educado y por lo mismo exigente”, es la frase que representa a Café Combate.
Chihuahua vio nacer en 1923 la cafetería “El Combate”, fundada por José E. Díaz Díaz, donde vendía el café que él mismo tostaba en su estufa de leña. Tanta fue la demanda que logró “Don José” con su producto, que catorce años después, el grano de café era trasladado al estado de Veracruz en furgones del ferrocarril.
Fue entonces cuando se convertiría en “Tostadores y Molinos de Café Combate S.A.”. El esfuerzo de Don José se vio reflejado durante años, de manera que, para 1941 Mexicali, Baja California y Hermosillo, Sonora ya contaban con sus plantas de tostadores. En 1990 Café combate ya contaba con presentaciones de grano y soluble.
Un año después, se desarrollan los cuatro sabores de cappuccino con los que cuentan actualmente, así como el inicio del café helado, mejor conocido como “Kfreeze”. Pensando siempre en sus clientes, en 2016 aperturaron sus primeros expendios y estaciones en la ciudad de Chihuahua, de acuerdo con datos de su sitio web.
Hoy en día Café Combate cuenta con servicios especiales, como lo son visitas guiadas por las instalaciones, así como la venta de café al mayoreo, el cual es para restaurantes, hoteles, maquiladoras y oficinas; además, de cafeteras para negocios, para consumo mínimo.
